martes, 3 de febrero de 2015

POMPEYA 3 LOS EDIFICIOS DEL OCIO

ANFITEATRO: 
Es un tipo de lugar público de la civilización romana, utilizado para acoger espectáculos y juegos. Los más antiguos se construyeron en Etruria y Campania y datan de finales del siglo II a. C. Este tipo de edificio es una creación romana, y no tiene antecedentes ni en Grecia ni en Asia Menor.
Aparte de su función, la diferencia más notoria entre un anfiteatro y un teatro romano clásico, es que el anfiteatro tiene forma circular u ovalada, mientras que el teatro es semicircular. También hay que diferenciar el anfiteatro del circo, que era utilizado para espectáculos de carreras y tenía una forma elíptica.
El graderío se divide en cuatro zonas, siendo la inferior para los senadores y altos cargos de la administración romana, la zona media para la plebe y la superior para las mujeres y los carentes de derechos. Primero se construyeron mediante piedra tallada, posteriormente se utilizó el hormigón y se dispusieron arquerías y bóvedas.









TEATRO Y ODEON:

Se encuentra localizado junto al Foro Triangular, y se construyó siguiendo el estilo griego. Como la mayoría de los teatros y anfiteatros de la época, sus gradas están construidas sobre la ladera de una colina.

La altura del escenario es de 1 metro sobre el nivel de la orchestra, algo menor de lo habitual, probablemente para favorecer la visión de los magistrados que se sentaban en el espacio de la orchestra.


Sus tres caveas, ima, media y summa, podían acoger a unos 5000 espectadores.

En su parte posterior, disponía de un espacioso pórtico cuadrangular, que servía de distracción para los espectadores antes de los espectáculos.



                          




TERMAS:

Son utilizadas para relajarse, descargar tensiones, purificarse, también como aseos ya que en aquellos tiempo se acudía mucho a los baños públicos. Pero también en ellas se charla y se hace vida social en la cual se intercambian opiniones y se tratan numerosos temas de interés exactamente igual que en la actualidad.
Las termas del Foro, son unas de las más grandes de la ciudad y de mucho interés debido a la elegante decoración y el excelente estado de conservación del calidarium y del tepidarium de la sección masculina.

En las termas para hombres dos corredores dan acceso al apodypterium (vestíbulo) de donde se pasa al frigidarium (piscina de agua fría), en cuyo centro se encuentra una bañera circular para los baños fríos; y al tepidarium (sala templada), decorada con fino estuco de la mitad del siglo I a. C. Allí se conserva un gran brasero que servía para calentar el ambiente, que fue donado por Marcus Nigidius Vaccula. Del tepidarium se pasa directamente al ambiente para baños cálidos, el calidarium con temperaturas elevadas debido al paso del aire muy caliente a través de sus paredes dobles.
Esta habitación está dotada también de dos bañeras: el alveus, de forma rectangular, para los baños calientes, y el labrum, con agua fría.